plan de parto

¿Por qué es tan importante hacer un plan de parto? Dedicarle tiempo al parto, hablar, resolver dudas, investigar, y poner claridad sobre lo que quiero hacer, hace que llegado el momento, parir nos sea tan familiar, lo tengamos tan integrado, que lo vamos a recibir con entrega, devoción y con ganas de que acontezca, colocando a la mujer en el centro de los cuidados del parto.

Qué debo saber para hacer mi plan de parto

Antes de hacer un plan de parto es importante saber donde quiero parir y qué persona o personas quiero que me acompañen en el parto. Si das a luz en casa, tienes la opción de elegir el equipo de profesionales al completo. Si pares en el hospital, tu equipo es tu pareja y tu doula, aunque no en todos los hospitales nos dejan acompañar a la pareja. Pero elegir el hospital donde quiero parir me hace conocer de cerca sus protocolos y hacerme una pequeña idea de cómo trabajan sus profesionales.

Conocer opciones y elegir lugar donde dar a luz

Para realizar un plan de parto , lo primero es conocer las opciones y elegir el lugar. Para eso hay que empezar por descartar opciones. No podemos soñar con nuestro parto sin saber qué oferta tenemos para parir, ya que hay tantos partos como hospitales y personal sanitario. Por eso, en mi opinión, lo primero y lo más importantes es elegir el lugar, y conocer sus procedimientos y protocolos de actuación, tanto en el parto como en el post parto inmediato. Me reafirmo en mi opinión porque me encuentro con dos tipos de corrientes: mujeres que nunca escucharon un relato sobre un parto, o mujeres que les han contado vivencias sobre sus partos, la mayoría de las veces una experiencia negativa, y en ocasiones incluso traumática.
Una vez que tengamos claro donde vamos a parir, hay que hacer un trabajo personal de confianza ciega y absoluta en el personal que va atender nuestro parto.

Realizar este trabajo de confianza ciega nos va a dejar estar con nosotras en ese momento, con nuestra dinámica de parto, concentradas y conectadas con lo que sabemos hacer, que es parir. En el momento del parto no debes cuestionar lo que esta pasando, llegado ese punto es la pareja o acompañantes quien tienen que tomar las riendas, nunca nosotras, ya que la conexión con el parto nace desde dentro, y ningún estímulo exterior debe perturbarlo. Realizar el plan de parto junto con nuestra pareja o acompañante hace que la comunicación verbal previa la parto, se transforme en una comunión no verbal en el parto, con una conexión mágica y absoluta entre vosotrxs. Un equipo imbatible.

Estructura de mi plan de parto

Una vez que hallamos conocido las distintas ofertas para parir, digamos que tenemos una parte de la estructura, los cimientos.

Con esa información empezaremos a construir nuestro plan de parto, único e irrepetible, porque cada hijx te regala un parto diferente. No hay dos partos iguales.

Tanto si quieres parir en casa como en un hospital, mi consejo es que hagas visitas guiadas. En el caso de los hospitales, para conocer sus procedimientos y protocolos de actuación. Y en el caso de que queráis parir en casa, podéis conocer de primera mano a la matrona y a la doula, y que sean ellas las que te cuenten sus seguimientos de los embarazos, sus protocolos y procedimientos sobre el parto en casa.

El hecho de tener claro si queréis parir en casa o en un hospital, el ir a visitarlo o entrevistaros con el equipo que os acompañará, el no hacer que vuestros miedos puedan seguir presentes, son aspectos cruciales, un gran avance para empezar a construir tu plan de parto. Siempre cuento a las personas que he tenido el gusto de acompañar que si tuviéramos que parir de un día para otro, sería imposible. Si, y digo imposible, porque nuestro cuerpo físico y nuestra mente no estarían preparadas, entraríamos en un bloqueo corporal y mental de locura.

El estar nueve meses gestando hace que nuestra psique y nuestro cuerpo se preparen, y que todo sea armónico entre nosotras, esperando que llegue ese momento tan especial y deseado, y esperar así que nuestro parto sea una de las experiencia más maravillosas de nuestra vida.

Espectativa vs realidad

Ocurre que en muchas ocasiones el plan de parto es una fantasía, a veces ni siquiera una fantasía nuestra. Nos hacemos una idea del parto por lo que nos han contado o hemos vistos en alguna película o serie, y no nos escuchamos por dentro, cómo queremos parir, cómo queremos que sea nuestro parto y qué necesitamos para hacerlo único. Nos han ido contando tantas cosas, nos han metido tanto miedo, lo han institucionalizado tanto, que casi lo vivimos como una enfermedad, siento que empezar de cero y ser puras con nuestras decisiones es muy difícil, casi imposible.

A veces siento que esa vulnerabilidad que tenemos por estar embarazadas, que el empoderamiento que depositamos en el personal sanitario, en las vivencias que nos cuentan otras mujeres, no permite tener el control, no permite dejarnos llevar, no nos permite tomar las riendas de nuestra propia experiencia. Cada embarazo es una parte de nuestra vida y nuestra historia personal, y nosotras debemos decidir cómo vivirla.
Es muy importante hacer un plan de parto con una persona que los acompañe, que tenga la experiencia de un parto tatuada en su piel, para que pueda ir acompañando tus expectativas, tus ilusiones y tus miedos, y juntas darle ese toque de realidad adaptada para ti, para que tu parto se convierta en una experiencia tuya. Y que al recordarlo no sólo recuerdes el momento en el que te colocas o colocan a tu hijx sobre ti, haciendo piel con piel o cuando le ves el rostro por primera vez, sino que puedas recordar el parto como ese momento en el que llegó una sintonía perfecta en ti, donde tu bebé y tú os pusisteis de acuerdo para empezar con esa dinámica de parto. Así disfrutareis de lo que esta aconteciendo en cada segundo, en cada instante.

 

¿Hiciste un plan de parto antes de dar a luz? ¿Hiciste un plan de parto con tu segundo y tercer hijx, pero no con el primero? Si te apetece escribir en los comentarios, yo estaré encantada de leerte.

«Para cambiar el mundo primero hay que cambiar la forma de nacer»

Michel Odent